Cada año, son miles los peregrinos que se ponen en marcha con el único fin de llegar a Santiago de Compostela.
Durante todo ese recorrido, las experiencias que vivirán los peregrinos los marcará de tal forma que no lo olvidarán jamás y en muchos casos, sentirán la necesidad de volver a vivir de nuevo la ilusión del Camino.
La mayoría de los peregrinos decide realizar el Camino a pie, opción que requiere más esfuerzo físico, sobre todo si no se está acostumbrado a caminar largas distancias. Aunque caminando se disfruta mucho más de cada etapa del Camino de Santiago conociendo muchos paisajes y personas.
También hay un gran número de peregrinos que su opción es la bici. Es una de las formas más populares de recorrer el Camino de Santiago. Es importante controlar el peso del equipaje y contar con un kit específico para el mantenimiento de la bici. La ruta se completa en menos tiempo y supone un reto para los aficionados del ciclismo.
A caballo es otra de las alternativas para hacer el Camino de Santiago. En este caso es importante que el jinete se asegure de que el caballo está en perfecto estado durante todo el trayecto y de encontrar alojamientos que permitan descansar también al caballo.
Otra posibilidad es la de realizar el Camino en barco, para ello es necesario recorrer más de 100 millas náuticas navegando y 10 kilómetros a pie que pueden realizarse desde Muros hasta la Catedral de Santiago.
¡Buen camino!
Fuente: www.vivecamino.com